Manual de primeros auxilios en el burnout
Como hemos dicho, el burnout es un trastorno serio que no conviene tomar a la ligera. Es importante que consideres seriamente contar con ayuda profesional, ya que será tiempo y dinero bien invertidos. Mientras tanto, aquí tienes una serie de pautas básicas para manejar la situación en el corto plazo:
- Aceptación de la situación y resiliencia: Este no va a ser el fin de tu vida profesional, pero sí una situación que tendrás que enfrentar. Acéptalo, asúmelo y trata de enfocarlo como una oportunidad de cambio. Mantén la calma y no desesperes.
- Revisa tu lista de tareas: Probablemente convenga aligerar tu carga. Retrasa tareas y proyectos que no son prioritarios, delega lo que puedas y no tengas miedo de abandonar lo que carece de sentido o lleva demasiado tiempo pendiente.
- Practica ejercicios de relajación y respiración a diario: Yoga u otras técnicas de relajación te ayudarán a cuidar tu cuerpo y tu salud. Estos ejercicios facilitan tomar perspectiva y reducir la tensión.
- Habla de tu problema con familia y amigos: Buscar empatía y apoyo emocional es fundamental. Sentirse comprendido y arropado alivia el malestar y ayuda a enfrentar la situación con mayor fortaleza.
- Descansa y elimina conductas de escape: Dormir y descansar la mente es esencial. El cansancio agrava el desgaste emocional. Evita el alcohol, las drogas y el tabaco como refugio, ya que no solucionan el problema a medio o largo plazo.
- Procúrate distracciones y haz ejercicio: El humor, actividades en “estado de flujo”, deporte y compañía de amigos ayudan a desarrollar una visión más positiva de la vida, especialmente fuera del trabajo.
- Infórmate sobre el problema: Conocer el burnout, sus causas, consecuencias y fases ayuda a percibir la situación en toda su dimensión. Los testimonios de personas que han pasado por esto también pueden aportar comprensión y sensación de no estar solo.
- Identifica estresores concretos y trata de eliminarlos: Si hay situaciones, personas, proyectos o dinámicas que te dañan, intenta evitarlas o eliminarlas. Prioriza tu salud sobre otras consideraciones.
Estas recomendaciones son útiles para actuar a corto plazo, pero es fundamental abordar el burnout de forma sistemática y con la ayuda de un profesional cualificado. La inversión en tiempo y dinero merecerá la pena para una recuperación efectiva.
